Aproximadamente en 2014 conseguí mi primer trabajo como freelancer. Un diseño sencillo que seguramente cobre súper barato, pero que significó mucho para mi porque de repente descubrí que había una forma de hacer dinero sin tener un trabajo fijo con sus horarios y demás.
Por aquella época yo seguía pensando que tener un trabajo con oficina era el mejor camino a perseguir, pero poco tiempo después la vida me puso en otro camino.
Digamos que emigrar me condicionó, o al menos eso pensé yo, a buscar otros caminos y a alejarme de mi carrera de diseñador.
Para resumir el cuento, en 2018 conseguí mi primer cliente de marketing digital y contenido y aunque para entonces era yo solito con una compu y mi cámara, quise comenzar a utilizar un nombre que no fuese el mío con la expectativa de hacer crecer el proyecto; ahí nació Cocoloco.
Durante bastante tiempo seguí presentándome como “hago marketing digital de forma freelance” hasta que la pandemia llegó y muchas cosas cambiaron.
Sin entrar en demasiados detalles, para no aburrirlos, tengo que admitir que el cambio de discurso entre “soy marketer digital freelance” a “lideró una agencia de marketing digital” crea un impacto muy distinto en los potenciales clientes. Aunque hoy en día el equipo sigue siendo muy chico y poco estructurado; funciona y creo que tiene potencial de escalar muy pronto.
Estas son algunas cosas que he aprendido en el proceso de hacer ese cambio de mindset y realmente convertir mi proyecto en algo más que simplemente yo.
La red de contactos es todo
¿Han escuchado la frase “contacto mata CV”? Pues a la hora de crear un negocio, funciona exactamente igual.
Tener conexiones y contactos es fundamental para el éxito de un negocio que está comenzando. La semana pasada hable un poco de hacer networking con las personas indicadas y hoy el consejo se mantiene vigente.
Si nos vamos a 2018, mi forma de hacer networking en ese entonces fue a través de un proyecto en que el trabaje dentro de la industria en la que quería conseguir clientes. Contactar a muchos dueños de locales de café fue el pequeño puntapié para crear una red de conocidos que incluso hasta el día de hoy nutro y mantengo porque me ha dado muchas oportunidades.
Hay que entender sobre negocios
Esta fue una de mis más grandes piedras en el camino durante mucho tiempo.
A ver… yo estudié diseño gráfico y me enfoque en desarrollar mis habilidades creativas únicamente. Nadie te enseña cómo calcular márgenes de ganancia, valor por hora de trabajo, crear planes de servicios, ni muchísimo menos, proyecciones de crecimiento. Es muy difícil arrancar un negocio sin conocimientos de negocios.
Mi consejo para simplificar este paso y al menos comenzar a darle forma a tu proyecto es que definas muy bien 3 puntos importantes:
¿A quién le vas a ofrecer tus servicios? No es lo mismo buscar trabajar con negocios locales que con marcas mundialmente reconocidas.
¿Que servicios vas a ofrecer? Acá hay que ir al detalle… No sirve decir “social media management” y ya. Define bien que vas a incluir, cómo vas a entregar, etc.
¿Cuánto vas a cobrar? Si bien uno ajusta los precios un poco de acuerdo a cada cliente, es importante tener unos mínimos como para asegurarte de que no vas a perder tiempo en proyectos poco rentables. Al principio esto parece un consejo contraproducente, queremos agarrar todo lo que salga, pero créeme que me lo vas a agradecer luego.
Cuida cómo te relacionas con tus clientes
Piensa en lo siguiente:
¿Es mejor un cliente que pague $10000 durante 1 solo mes o uno que pague $2000 durante 12 meses?
La retención de los clientes significa el éxito de tu negocio. Buscar nuevos clientes es muy importante, pero es un proceso que toma tiempo y muchísimo esfuerzo. Mientras que mantener contentos a los que ya tienes, debería ser más sencillo.
Este punto sin embargo tiene su complejidad y va evolucionando constantemente a lo largo del tiempo, pero yo soy culpable de haber perdido clientes por no explicar bien cómo se entregaba el servicio o por no haber establecido las condiciones del trabajo desde el principio, por ejemplo. Ser claros y empáticos nos puede llevar muy lejos.
Identifica el momento de delegar - Y DELEGA
“Yo voy a hacer todo porque quién lo va a hacer mejor que yo” 🙄
Saca ese pensamiento de tu vida… ya.
No podemos ser especialistas en todo y muchas veces para ofrecer un mejor servicio cada vez, es necesario delegar.
La cuestión es que delegar no es solo buscar a otra persona que haga algo específico, tenemos que supervisar ese trabajo y tenemos que comunicar de forma precisa que es lo que se busca y etc.
El momento de delegar suele llegar cuando:
Necesitamos ofrecer un servicio especializado en el cual no somos expertos.
Tenemos muchas tareas en nuestras manos y no todas tienen el mismo nivel de prioridad para nosotros.
Queremos sumar nuevos servicios/productos a nuestro negocio.
Como dije antes, mi equipo actualmente es bastante chico, pero delego tareas que son menores y que las puede ejecutar mi asistente y delego un servicio que mis clientes necesitan y yo ni sé ni quiero aprender a hacer.
De a poco y si el crecimiento lo permite, la idea es delegar aún más para poder aprovechar mi tiempo en las cosas que son clave para el negocio.
Como ven, hacer la transición no es solo crear un nombre, un logo y comenzar a decir “mi agencia”, sino que entran en juego algunas variables que quizás antes no teníamos en cuenta - y no entramos en los detalles legales o impositivos que este cambio puede representar.
Para el cafecito de la semana ☕️
La historia del superhéroe de tu marca es algo sumamente poderoso que necesitas entender para explotar los mensajes de tu marketing.
Si son fanáticos del orden y la impresión 3D, este video los va a llenar mucho de vida.
¿Lo que buscas es crear una startup? Aquí algunos consejos de alguien con experiencia.
Primer newsletter de abril – Repasemos el más leído de marzo, por si te lo perdiste 😉
No hay que levantarse a las 5AM
La respuesta a “¿Cómo podes hacer tantas cosas?” No tiene que ver con ser un genio ni nada por el estilo sino más bien con entender y aplicar ciertos sistemas.
No les voy a mentir, la vida con trabajo excesivo no es color de rosa y ya pase por mis épocas de estar quemado -una experiencia que no le deseo a nadie- pero el tiempo me ha enseñado mucho y estos consejos aunque no son infalibles te pueden poner en el camino correcto para ser “más productivo”. Lee el artículo completo aquí.